Nuestro viaje comienza al aterrizar en Estambul, donde te estaremos esperando para llevarte directamente al hotel en el corazón de la ciudad. Después del check-in, tendrás tiempo para instalarte y empezar a sentir el pulso de esta metrópolis fascinante.
Tendremos unprimer contacto con la ciudad, un paseo por los alrededores – quizás hasta la cercana plaza Sultanahmet para tomar el primer té turco de muchos.
El ambiente vibrante de las calles, los aromas a especias y el murmullo de la ciudad te irán preparando para lo que vendrá en los próximos días.

La magia de Estambúl

Hoy toca despertarse entre dos imperios: comenzamos con los mosaicos bizantinos de Cora, seguidos de las vistas desde Pierre Loti – donde el tiempo parece detenerse frente al Cuerno de Oro. Tras reponer fuerzas con sabores locales, el Palacio de Dolmabahçe nos sorprenderá con su opulencia decimonónica. Cada parada es una capa diferente de esta ciudad que nunca deja de revelar secretos.

Tras el desayuno, iniciamos el trayecto hacia Capadocia atravesando los frondosos paisajes de las montañas de Bolu. Nuestra primera parada será Ankara, la moderna capital turca, donde visitaremos el majestuoso Mausoleo de Atatürk, símbolo de la Turquía contemporánea. Después de un almuerzo con auténticos sabores locales, continuaremos el viaje disfrutando de las vistas del impresionante Lago Salado (Tuz Gölü), cuyo paisaje blanco y brillante crea un efecto casi mágico al atardecer.

La ruta nos ofrece un fascinante contraste entre la bulliciosa Ankara y la serenidad de los paisajes naturales que nos rodean. Al caer la tarde, llegaremos a nuestro hotel en Capadocia, donde una reconfortante cena nos espera. Mañana nos adentraremos en los legendarios paisajes lunares de esta región única, pero por hoy, el descanso y la expectación serán nuestros compañeros.

El día comienza pisando una tierra que parece de otro planeta. En Göreme, las iglesias excavadas en la roca nos susurran historias de monjes bizantinos, mientras sus frescos dorados brillan bajo la luz que se cuela por las ventanas naturales. Los valles de Capadocia nos reciben con sus formaciones caprichosas – algunas delicadas como encajes, otras imponentes como fortalezas.

El almuerzo nos devuelve a la tierra con sus sabores terrosos y especiados. Por la tarde, las manos hábiles de los artesanos nos muestran cómo transforman la lana en alfombras que cuentan historias y la arcilla en obras de arte.

La noche ofrece una elección: descansar con el recuerdo de las chimeneas de hadas bailando en la memoria, o sumergirse en la energía de una velada folclórica, donde el ritmo de la música y el sabor del vino local hacen honor a la legendaria hospitalidad turca.

El día comienza con energías renovadas para descubrir los rincones más fascinantes de Capadocia. En Pasabag, las «chimeneas de hadas» más impresionantes nos esperan, con sus formas que desafían la gravedad. El Valle de Imagines nos sorprenderá con sus rocas que parecen esculpidas por artistas caprichosos.

La aventura continúa bajo tierra en Kaymakli, una de las ciudades subterráneas más extraordinarias del mundo. Recorreremos sus túneles laberínticos y cámaras excavadas, testigos de la ingeniosidad humana para sobrevivir en este paisaje único.

Después de reponer fuerzas con un almuerzo lleno de sabores auténticos, la tarde nos lleva a Çavuşin, un pueblo abandonado que parece detenido en el tiempo. El Valle Rojo, con sus tonos ocres y rojizos, nos regalará el atardecer más memorable del viaje, donde las rocas parecen arder con los últimos rayos de sol.

Madrugamos para emprender el viaje hacia Pamukkale, haciendo paradas estratégicas que convierten el trayecto en parte de la aventura. En el camino:

Caravansarai Sultanhanı: Esta antigua posada de caravanas del siglo XIII nos transporta a la época de la Ruta de la Seda, donde mercaderes descansaban tras largas jornadas.

Konya: Breve parada en esta ciudad espiritual, cuna de los derviches giróvagos, donde incluso una pausa rápida transmite su aura mística.

Al llegar a Pamukkale, la visión es sobrecogedora: terrazas blancas de travertino que parecen cascadas congeladas, formadas durante milenios por aguas termales ricas en minerales. Caminaremos descalzos por estas piscinas naturales, sintiendo el agua tibia correr entre nuestros pies mientras el atardecer tiñe todo de tonos dorados.

El día termina con una cena reconfortante, sabiendo que mañana nos esperan más maravillas.

Tras el desayuno, nos esperan una visita magica en Hierapolis, Roma en su esplendor, tras la visita nos dirigimos a Selçuk, puerta de entrada a Éfeso, donde las piedras milenarias aún respiran historia. Recorreremos esta metrópolis grecorromana excepcionalmente conservada, pisando los mismos mármoles que transitaban filósofos y comerciantes:

Biblioteca de Celso: Su fachada monumental sigue desafiando los siglos

Teatro: Con capacidad para 25,000 espectadores, donde aún parece escucharse el eco de las tragedias clásicas

Templos de Adriano y Trajano: Joyas arquitectónicas que muestran el esplendor imperial
La jornada termina en Kusadasi, donde la cena nos espera con sabores del mar Egeo.

Hoy tendremos un dia de Mediterraneo, los colores, azules, turquesas inundarán nuestro día, Disfrutaremos de un paseo en barco por la costa y tendremos tiempo para disfrutar de la playa y nuestro Resort junto al mar.
Nos merecemos un descanso después de tantos días de cultura y emoción, así emprenderemos la recta final del viaje con mucha energía.

Tras el desayuno, nos dirigimos a Pérgamo, el legendario centro del saber antiguo. El funicular nos lleva a la acrópolis, donde el Asclepeion nos revela sus secretos:

Recorreremos los túneles de curación donde los pacientes esperaban sueños reveladores

Admiraremos el pequeño teatro donde las obras formaban parte de la terapia

Caminaremos por la calle sagrada flanqueada de columnas jónicas

Después de un almuerzo con sabores egeos, viajamos al escenario del mito más famoso: Troya. Entre sus nueve capas arqueológicas, buscamos huellas de la guerra cantada por Homero – desde las murallas que resistieron diez años de asedio hasta la réplica del caballo de Troya que simboliza el ingenio griego.

El día termina en Çanakkale, estratégicamente situada junto a los Dardanelos, donde la cena nos espera con vistas al estrecho que ha marcado el curso de la historia.

El viaje nos lleva hoy a Bursa, la cuna del Imperio Otomano, donde la historia se respira en cada rincón. Comenzamos explorando la Gran Mezquita (Ulucamii), con sus 20 cúpulas y caligrafías que narran siglos de devoción.

En el Kozahan, el antiguo bazar de la seda, el tacto de las telas brillantes y el aroma a té de manzana nos transportan a la época en que Bursa era el corazón de la Ruta de la Seda.

El Mausoleo Verde (Yeşil Türbe), con sus azulejos turquesas, guarda los restos del sultán Mehmet I, ofreciendo un remanso de paz entre jardines centenarios.

Después de un almuerzo con sabores auténticos de la región – como el famoso Iskender kebab – la tarde es libre para pasear por los mercados o relajarse en el hotel. La cena será el broche perfecto para un día lleno de descubrimientos.

Consejo Wexplorer: No te pierdas probar los castañas confitadas, un dulce tradicional de Bursa.

Tras el desayuno emprendemos rumbo hacia Estambul, a un lado Asia al Otro Europa..jeje

Llegaremos al corazón de la ciudad donde tendremos diferentes visitas, como Santa Sofía, La Mezquita Azul, el Hipodromo de Teodosio, la fuente del Emperador Guillermo, el Obelisco Egipcio etc… y como colofón el primer conacto con el Gran Bazar.
Auqnue si el grupo sigue con marcha podremos acercarnos de una manera distendida al Bazar de las Especies junto al Bósforo
A disfrutar familia

Wow ! Tras el desayuno espectacular nos espera otro día de visitas seguir disfrutando de esta hermosa ciudad,
El Palacio de Topkapi, la joya de Estambul, el corazón del Imperio Otomano donde sultanes gobernaron entre jardines de tulipanes, harenes secretos y vistas al Bósforo que quitan el aliento»

Con 300,000 manuscritos en su biblioteca y 86 quilates en el diamante Kasikci, Topkapi supera cualquier ficción sobre lujo oriental.»
El Harem de Topkapi escondía más que intrigas: sus azulejos de Iznik cuentan historias de poder, celos y poesía escrita en oro. ¿Listo para descubrirlas?.

ya despues de comer, tendremos tiempo libre para disfrutar del Bazar, o porque no darnos un paseo espectacular en barco por el Bósforo (no inluído)

El último amanecer en suelo turco llega sin prisas, como si supiera que cuesta despedirse. Mientras tomas ese último café turco – espeso, aromático y con su poso de recuerdos – los paisajes del viaje pasan por tu memoria:

Las cúpulas de Estambul reflejando el sol del Bósforo

Las «chimeneas de hadas» de Capadocia al atardecer

El mármol cálido de Éfeso bajo tus pies

El blanco cegador de Pamukkale contrastando con el cielo azul

Los ecos de Troya en cada piedra milenaria

Te llevas más que fotos: el tacto de alfombras tejidas a mano, el sabor de especias desconocidas, el sonido de la llamada a mezquita mezclándose con risas en los bazares.

El traslado al aeropuerto será tranquilo, con ese silencio cómplice de quien sabe que ha vivido algo especial. Turquía no se despide – solo te susurra «hasta pronto» mientras guardas el boarding pass. Porque un país tan generoso en historias siempre merece un segundo capítulo.